El blog de la Motivación y Superación personal
Recopilaciones de experiencias y enlaces de momentos que me han servido en mi motivación personal, seguro que pueden ayudarte.
sábado, 22 de agosto de 2015
La Tortuga y la Liebre
En el mundo de los animales vivía una liebre muy orgullosa y vanidosa, que no cesaba de pregonar que ella era la más veloz y se burlaba de ello ante la lentitud de la tortuga.
- ¡Eh, tortuga, no corras tanto que nunca vas a llegar a tu meta! Decía la liebre riéndose de la tortuga. Un día, a la tortuga se le ocurrió hacerle una inusual apuesta a la liebre:
- Estoy segura de poder ganarte una carrera.
- ¿A mí? Preguntó asombrada la liebre.
- Sí, sí, a ti, dijo la tortuga. Pongamos nuestras apuestas y veamos quién gana la carrera.
La liebre, muy ingreída, aceptó la apuesta.
Así que todos los animales se reunieron para presenciar la carrera. El búho señaló los puntos de partida y de llegada, y sin más preámbulos comenzó la carrera en medio de la incredulidad de los asistentes.
Astuta y muy confiada en si misma, la liebre dejó coger ventaja a la tortuga y se quedó haciendo burla de ella. Luego, empezó a correr velozmente y sobrepasó a la tortuga que caminaba despacio, pero sin parar. Sólo se detuvo a mitad del camino ante un prado verde y frondoso, donde se dispuso a descansar antes de concluir la carrera. Allí se quedó dormida, mientras la tortuga siguió caminando, paso tras paso, lentamente, pero sin detenerse.
Cuando la liebre se despertó, vio con pavor que la tortuga se encontraba a una corta distancia de la meta. En un sobresalto, salió corriendo con todas sus fuerzas, pero ya era muy tarde: ¡la tortuga había alcanzado la meta y ganado la carrera!
Ese día la liebre aprendió, en medio de una gran humillación, que no hay que burlarse jamás de los demás.
También aprendió que el exceso de confianza es un obstáculo para alcanzar nuestros objetivos. Y que nadie, absolutamente nadie, es mejor que nadie
Frases:
La forma de desarrollar la confianza en ti mismo es hacer lo que temes y llevar un registro de tus experiencias exitosas.-William Jennings Bryan.
Cree en ti, ten fe en tus habilidades. Sin una humilde pero razonable confianza de tu poder, no puedes ser exitoso o feliz.-Norman Vincent Peale.
El éxito se alcanza con mayor frecuencia por aquellos que no saben que el fracaso es inevitable.-Coco Chanel.
domingo, 11 de enero de 2015
El billete de 50 dolares.
Alfredo, con el rostro abatido de pesar se reúne con su amiga Marisa en un bar a tomar un café.
Deprimido descargó en ella sus angustias…que el trabajo, que el dinero, que la relación con su pareja, que su vocación…todo parecía estar mal en su vida.Alfredo, un poco confundido al principio, inmediatamente le dijo:
Marisa introdujo la mano en su cartera, sacó un billete de 50 dólares y le dijo:
– Alfredo, quieres este billete ?
– Claro Marisa…son 50 dólares, quién no los querría ?
Entonces Marisa tomó el billete en uno de sus puños y lo arrugó hasta hacerlo un pequeño bollo. Mostrando la estrujada pelotita verde a Alfredo volvió a preguntarle:
– Y ahora igual lo quieres ?
– Marisa, no sé qué pretendes con esto, pero siguen siendo 50 dólares, claro que los tomaré si me lo entregas.
Entonces Marisa desdobló el arrugado billete, lo tiró al piso y lo restregó con su pie en el suelo, levantándolo luego sucio y marcado.
– Lo sigues queriendo ?
– Mira Marisa, sigo sin entender que pretendes, pero ese es un billete de 50 dólares y mientras no lo rompas conserva todo su valor…
– Entonces Alfredo, debes saber que aunque a veces algo no salga como quieres, aunque la vida te arrugue o pisotee sigue siendo tan valioso como siempre lo hayas sido…lo que debes preguntarte es cuanto vales en realidad y no lo golpeado que puedas estar en un momento determinado.
Alfredo quedó mirando a Marisa sin atinar con palabra alguna mientras el impacto del mensaje penetraba profundamente en su cerebro.
Hay que aprender a valorarse y luchar por conseguir nuestros objetivos.
Recuerda, si luchas puedes perder, pero sino luchas estas perdido.
domingo, 14 de diciembre de 2014
La sopa de piedras
“Cierto día, llegó a un pueblo un hombre y pidió por las casas para comer, pero la gente le decía que no tenían nada para darle. Al ver que no conseguía su objetivo, cambió de estrategia. Llamó a la casa de una mujer para que le diese algo de comer.
– “Buenas tardes, Señora. ¿Me da algo para comer, por favor?”
– “Lo siento, pero en este momento no tengo nada en casa”, dijo ella.
– “No se preocupe – dijo amablemente el extraño -, tengo una piedra en mi mochila con la que podría hacer una sopa. Si Ud. me permitiera ponerla en una olla de agua hirviendo, yo haría la mejor sopa del mundo.
– ¿Con una piedra va a hacer Ud. una sopa? ¡Me está tomando el pelo!
– En absoluto, Señora, se lo prometo. Deme un puchero muy grande, por favor, y se lo demostraré”
La mujer buscó la olla más grande y la colocó en mitad de la plaza. El extraño preparó el fuego y colocaron la olla con agua. Cuando el agua empezó a hervir ya estaba todo el vecindario en torno a aquel extraño que, tras dejar caer la piedra en el agua, probó una cucharada exclamando:
– ¡Deliciosa! Lo único que necesita son unas patatas”.
Una mujer se ofreció de inmediato para traerlas de su casa. El hombre probó de nuevo la sopa, que ya sabía mucho mejor, pero echó en falta un poco de carne.
Otra mujer voluntaria corrió a su casa a buscarla. Y con el mismo entusiasmo y curiosidad se repitió la escena al pedir unas verduras y sal. Por fin pidió: “¡Platos para todo el mundo!”.
La gente fue a sus casas a buscarlos y hasta trajeron pan y frutas. Luego se sentaron todos a disfrutar de la espléndida comida, sintiéndose extrañamente felices de compartir, por primera vez, su comida.
Y aquel hombre extraño desapareció dejándoles la milagrosa piedra, que podrían usar siempre que quisieran hacer la más deliciosa sopa del mundo.”
Moraleja: Con la cooperación se alcanzan resultados notables, aún cuando se parta de contribuciones pequeñas, o incluso insignificantes. Esta es la fuerza milagrosa que tiene el COMPARTIR. Cada uno podemos poner alguna de nuestras virtudes al servicio de los demás y el resultado puede ser espectacular.
Frases:
Para triunfar en la vida no debes darte por vencido ante los problemas, sigue adelante, aprende de los errores y podrás vencer.”
“La clave para seguir adelante a pesar de las dificultades es tener una actitud ganadora, llena de positivismo.”
Para abrir nuevos caminos, hay que inventar; experimentar; crecer, correr riesgos, romper las reglas, equivocarse… y divertirse.
domingo, 7 de diciembre de 2014
El pozo de agua.
En búsqueda de una nueva forma de provisionarse de agua, un hombre decidió cavar un pozo en su terreno.
Miró por todos lados para ver qué lugar sería el adecuado para cavarlo. Una vez elegido el lugar, cavó hasta los cinco metros sin encontrar ni una sola gota de agua.
Desanimado, dejó de cavar allí pensando que no era el sitio idóneo. Buscó una nueva área del terreno y esta vez hizo un agujero con una profundidad de 7 metros.
Tampoco halló el líquido elemento. Hizo un tercer intento en otro espacio del terreno y esta vez cavó hasta los 10 metros y nada. No encontró agua.
El hombre se dio por vencido y concluyó que era mejor vender el terreno porque no le sería útil cultivarlo sin tener con qué regar.
Un buen día, el hombre fue a visitar al nuevo dueño del terreno y se topó con un hermoso pozo de agua. Extrañado le dijo: “Amigo, habrás tenido que cavar en muchos lugares hasta encontrar el agua.
Recuerdo que yo piqué muchos metros y nada, no encontré ni gota de agua.”, dijo el visitante. El dueño le respondió: “Estás equivocado,
La verdad es que yo sólo cavé doce metros, pero la diferencia es que yo siempre lo hice en el mismo sitio”.
Frases:
"Solo triunfa en el mundo quien se levanta y busca a las circunstancias, creándolas si no las encuentra"
"Sólo se ha perdido cuando se deja de luchar"
"Ten paciencia y también tendrás una recompensa"
martes, 2 de diciembre de 2014
El pan quemado.
Después de un día pesado de trabajo, mi madre preparó un plato de salchichas y pan tostado muy quemado y se lo dio a mi padre. Esperando que él lo note, me quedé sentado observando la situación. Aunque mi padre lo notó, tomó un pan tostado quemado, sonrió a mi madre y me preguntó qué tal me había ido en la escuela.
No recuerdo qué le contesté, pero sí recuerdo a mi padre untándole mantequilla y mermelada al pan y comérselo todo sin quejarse.
Cuando me levanté de la mesa y me fui a mi cuarto, escuché a mi madre pidiéndole disculpas a mi padre por los panes tostados que se le quemaron. Nunca olvidaré lo que él le dijo: “Cariño, no te preocupes, a veces me gustan los panes tostados bien quemados”.
Antes de dormir fui a dar el beso de buenas noches a mi padre y le pregunté si le gustaban los panes quemados. Él me abrazó y me dijo: “Tu mamá tuvo un día difícil de trabajo, está cansada y un pan tostado un poco quemado no le hace daño a nadie. La vida está llena de cosas imperfectas, gente imperfecta…Debemos aprender a aceptar los defectos y decidir cómo reaccionar ante las diferencias de los demás, eso es muy importante para tener una relación sana y duradera. Un pan tostado quemado no debe romper un corazón”.
Reflexión
La comprensión y la tolerancia es la base de cualquier tipo de relación humana. Hay que saber ser empático y ponerse en el lugar de los demás antes de reaccionar de manera fea con los demás. Sé más amable con las personas, no sabes qué problemas, qué situaciones tuvieron en su día, sé considerado con los demás. Todos libramos algún tipo de batalla diaria. La felicidad es una decisión que cada uno toma.Los dos amigos
Cuenta una antigua leyenda árabe sobre dos amigos quienes iban viajando por el desierto hacia otro pueblo. Sin mucho panorama alrededor, las conversaciones se iban agotando, palabras iban y venía y tras varios intercambios y ciertas discrepancias, terminaron discutiendo hasta llegar a un golpe. El hombre que había sido agredido, ofendido, escribió en la arena: “Hoy mi mejor amigo me pegó una bofetada en el rostro”.
Siguieron el camino y llegaron a un bello oasis con un lago y mucha vegetación donde hicieron una parada para refrescarse y comer algo. Mientras se bañaban, el que había sido abofeteado comenzó a ahogarse, siendo salvado por su amigo.
Cuando estuvo bien, tomó un estilete y escribió en una piedra: “Hoy mi mejor amigo me salvó la vida”. Intrigado, el amigo se acercó y le preguntó: “¿Por qué escribiste primero en la arena y luego en la piedra?” Sonriendo, él le respondió: “Si un buen amigo nos ofende, tenemos que escribir lo que pasó en la arena donde el viento la empuja y el perdón hace que se borre dicha ofensa. Pero cuando algo muy bueno sucede, es mejor grabarlo en la piedra de la memoria, donde nadie podrá borrar lo que escribamos”.
Frases;
Los amigos son como los taxis, cuando hay mal tiempo escasean.
Los amigos se hieren con la verdad para no destruirse con las mentiras.
Al final, no nos acordaremos tanto de las palabras de nuestros enemigos, sino de los silencios de nuestros amigos.
lunes, 24 de noviembre de 2014
La vida es como las naranjas, hay que sacarles el jugo a tiempo.
Juan trabajaba en una empresa hacía dos años.Siempre fué muy serio, dedicado y cumplidor de sus obligaciones. Llegaba puntual y estaba orgulloso de que en dos años nunca recibió ninguna amonestación.
Cierto día buscó al Gerente para hacerle un reclamo:
- Señor, trabajo en la empresa desde hace dos años con bastante esmero y estoy a gusto con mi puesto, pero siento que he sido postergado. Mire, Fernando ingresó en un puesto igual al mío hace solo seis meses y ya ha sido promovido a supervisor.
- ¡Ajá! -respondió el gerente-. Mientras resolvemos este problema que me planteas, quisiera pedirte que me ayudes a resolver otro. Quiero dar fruta al personal, para el almuerzo de hoy. En el negocio de la esquina venden frutas. Por favor averigua si tienen naranjas.
Juan se esmeró en cumplir con el encargo de su jefe y en 5 minutos ya estaba de vuelta en la oficina.
- Bueno Juan! ¿qué averiguaste?
- Señor, sí tienen naranjas para la venta.
- ¿Y cuánto cuestan?
- ¡Ahhh…! no pregunté eso.
- Bueno, ¿pero viste si tenían suficientes naranjas para todo el personal?,- preguntó serio el Jefe.
- Tampoco pregunté eso señor.
- ¿Hay alguna fruta que pueda sustituir la naranja?
- No sé señor, pero creo…
- Bueno, -dijo el Jefe-, espera, siéntate un momento.
El Gerente tomó el teléfono y mandó llamar a Fernando. Cuando se presentó, le dió las mismas instrucciones que le había dado con anterioridad a Juan y en 10 minutos estuvo de vuelta.
Cuando volvió,el Jefe le preguntó:
- Bien Fernando, ¿que noticias traes?
- Señor, tienen naranjas, las suficientes para todo el personal y, si prefiere, también tienen bananas, manzanas, kiwis y peras. La naranja está a 15 el kilo, la banana a 22, la manzana a 9 el kilo y el kiwi y el melón cuestan 28 el kilo. Me dijeron que si compra fruta en cantidad, nos harán un descuento del 8 por ciento. He dejado separada la naranja, pero si usted elige otra fruta debo regresar para confirmar el pedido.
- Muchas gracias, Fernando, pero espereme un momento.
Se dirigió a Juan, que había quedado boquiabierto y le preguntó:
- Juan, ¿que me decías?
- Nada señor, eso es todo. Muchas gracias.
Moraleja:
“El éxito es en gran parte el producto de elevar constantemente el nivel de nuestras aspiraciones
y el de nuestras expectativas”
Frases:
Si quieres que las cosas cambien no tengas siempre la misma respuesta para los mismos problemas.
Todas las batallas en la vida sirven para enseñarnos algo, inclusive aquellas que perdemos.
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